En la madrugada del 24 de mayo de 2025, el Centro Residencial de Acción Educativa (CRAE) Castell de Fang’ en Piera, Anoia, Cataluña, fue escenario de un violento ataque que ha reavivado el debate sobre la integración de menores migrantes no acompañados en la región. Un grupo de personas no identificadas lanzó piedras y líquidos inflamables contra el centro, causando daños materiales significativos, aunque sin heridos graves. Este incidente, que se suma a una serie de tensiones previas entre los menores tutelados y los residentes locales, no es un caso aislado en Cataluña, donde episodios similares en 2019 en Castelldefels y Canet de Mar evidencian un problema recurrente.
Detalles del ataque en Piera
El ataque al centro Castell de Fang’ ocurrió alrededor de las 5:00 de la madrugada del sábado 24 de mayo de 2025. Según informes de medios como El Caso y La Razón, un grupo de desconocidos irrumpió en el centro, lanzando piedras y líquidos inflamables, posiblemente gasolina, que provocaron un incendio en un sofá y rompieron varias ventanas. Los trabajadores del centro lograron extinguir el fuego con extintores, evitando daños mayores. Aunque no se reportaron heridos graves, una persona fue atendida por inhalación de humo (Atacan centro Piera).
Los Mossos d’Esquadra, alertados de inmediato, han iniciado una investigación para identificar a los responsables y determinar si el ataque está relacionado con los incidentes previos en el municipio. Además, han establecido un dispositivo de seguridad con agentes de la unidad de orden público (ARRO) para proteger el centro y prevenir nuevos altercados (Investigan ataque Piera). El ayuntamiento de Piera ha condenado enérgicamente cualquier acto de violencia o discriminación, instando a la población a manejar la información de manera responsable y respetuosa.
Contexto de tensiones en Piera
El ataque no ocurrió en un vacío. Durante la semana previa, Piera había sido escenario de varios enfrentamientos entre menores tutelados del centro y residentes locales. El miércoles, un joven mayor de edad tutelado por la Generalitat fue agredido, requiriendo traslado a un centro médico. El jueves, los Mossos d’Esquadra y la Policía Local intervinieron en un altercado que involucró a grupos de jóvenes, incluidos menores del centro, quienes fueron escoltados de regreso al CRAE para garantizar su seguridad (Tensión Piera).
Estas tensiones han llevado a algunos vecinos a convocar una concentración el mismo sábado, expresando su frustración por lo que describen como una «oleada de violencia» atribuida a los menores, muchos de origen magrebí (Concentración Piera). Sin embargo, estas protestas han generado críticas por parte de organizaciones de derechos humanos, que advierten contra el riesgo de estigmatización y xenofobia.
| Incidente | Fecha | Detalles | Respuesta |
|---|---|---|---|
| Agresión a joven | Miércoles, mayo 2025 | Un joven tutelado fue atacado, requiriendo atención médica | Traslado a centro médico |
| Altercados en el pueblo | Jueves, mayo 2025 | Enfrentamientos entre menores del centro y jóvenes locales | Mossos escoltaron a menores al centro |
| Ataque al CRAE | 24 de mayo de 2025 | Piedras y líquido inflamable, daños materiales | Investigación policial, dispositivo de seguridad |
Casos similares en Cataluña
El ataque en Piera no es un hecho aislado, sino que se inscribe en un patrón de hostilidad hacia centros de menores migrantes en Cataluña. En 2019, dos incidentes destacados en Castelldefels y Canet de Mar pusieron en evidencia las tensiones sociales derivadas de la llegada masiva de menores no acompañados.
- Castelldefels, marzo de 2019: El centro Cal Ganxo, que albergaba a 60 menores tutelados, fue atacado por un grupo de 25 personas encapuchadas el sábado 9 de marzo. Los agresores destrozaron mobiliario, lanzaron piedras y agredieron a menores y educadores, dejando un menor hospitalizado por una crisis de ansiedad y dos educadores con contusiones. Al día siguiente, un grupo de más de 60 personas intentó un segundo ataque, pero fue detenido por los Mossos d’Esquadra. La Generalitat calificó los hechos como «racistas e intolerables» y anunció acciones legales ante la Fiscalía de Delitos de Odio (Ataques 2019).
- Canet de Mar, febrero y marzo de 2019: El 28 de febrero, 40 vecinos protestaron frente al centro Can Xatrac, lanzando abucheos y gestos despectivos hacia los menores y el personal. El 5 de marzo, un hombre armado con un machete irrumpió en el centro, aunque no causó heridos. Fue arrestado por amenazas y liberado con cargos. Organizaciones como SOS Racismo denunciaron estos actos como xenófobos (Ataques racistas).
Estos incidentes reflejan un aumento en las tensiones sociales, exacerbado por el incremento del 145% en la llegada de menores no acompañados entre 2017 (1.489) y 2018 (3.659), según datos de la Generalitat (Ataques 2019).
Implicaciones sociales y políticas
El aumento de menores migrantes no acompañados ha puesto bajo presión el sistema de acogida de Cataluña. En 2024, la Generalitat reportó que acogía a 2.369 menores, aunque el Ministerio del Interior solo contabilizaba 1.417, lo que evidencia discrepancias en la gestión (Datos acogida). Además, un informe de la Sindicatura de Cuentas de 2025 señaló graves irregularidades en los centros de menores, incluyendo falta de personal capacitado y desajustes presupuestarios, lo que aumenta la vulnerabilidad de los jóvenes (Irregularidades centros).
Las tensiones en Piera y otros municipios también reflejan desafíos más amplios de integración. Los menores migrantes, muchos con trayectorias de vida marcadas por el trauma, enfrentan entornos con recursos limitados y, en ocasiones, rechazo social. Organizaciones como Amnistía Internacional han advertido que la falta de políticas efectivas contra el racismo y la xenofobia contribuye a estos incidentes (Ataques racistas).
Conclusión
El ataque al centro Castell de Fang’ en Piera es un recordatorio de los desafíos que enfrenta Cataluña en la acogida e integración de menores migrantes no acompañados. Si bien las autoridades han respondido con investigaciones y medidas de seguridad, es crucial abordar las causas subyacentes de estas tensiones, incluyendo la mejora de los recursos en los centros, la formación del personal y la promoción de programas de integración comunitaria. Solo a través de un enfoque integral se podrá garantizar la seguridad de los menores y fomentar una convivencia pacífica en la región.
